sábado, 11 de diciembre de 2010

Callejón barrio La Macarena


He llegado a este laberinto de ideas, corazonadas, suspiros y alegrías. He abierto este blog para expresar lo que me produce ver cada laberinto humano y físico de mi Bogotá. Calles repletas de abandono y de ideas; de buenas ideas nada más; casas antiguas, mensajeras de épocas doradas que ahora se derrumban para construir  edificios ostentosos y superficiales que reflejan el alma de sus inquilinos; museos y bibliotecas popochas de cultura, edificios públicos que esconden tinieblas, tugurios donde habitan dramas, dramas que por desgracia ya no nos conmueven . Tambíén veo el rostro de sus gentes,  la esperanza en los acróbatas del semáforo,  la brutalidad en los ladrones encapuchados,  la gula en los curas mal olientes, el respeto en los taxistas  honrrados, la libertad en los hippies aventureros,  la pasión en las prostitutas y sus ilusiones, la energía en los jóvenes  músicos del rock y el  hip hop . Todo estos forma en mi el imaginario, las raíces,  las vertebras, los hilos conductores, la membrana, la celulosa que le da vida a esta, a esta mi amada  Bogotá.